En el taller de restauración y dorado Nuestra Señora del Carmen, se ha procedido
a las restauración de las columnas que ha consistido, en la retirada del dorado y aparejos viejos, metiendo durante 24 horas las columnas en serrín húmedo, para dejarlas completamente en madera.
Una vez secas, se procede a la limpieza de toda traza de restos de purpurinas, barnices, etc, escofinándolas.
Se procede también a la restauración de la carpintería y talla que se precise, así como la construcción de las bases de las columnas. Se le da una mano de cola totín muy caliente. Se entrapan uniones y piezas sobrepuestas, dándoles siete manos de estuco. Se procede al retallado y lijado, dándoles cuatro manos de bol de primera calidad. Se pule el bol y se preparan los mates y a continuación se dora con oro fino de ley de 23 3⁄4 quilates de Manetti.
Se bruñen las zonas que van en brillo y se fijan los mates.
Hay que destacar que en restauraciones previas no se habia usado oro fino y como consecuencia ha habido que retirarlo en su totalidad y volverlas a dorar para devolverle su esplendor.
Con este proceso, continuamos engrandeciendo los enseres de cultos de esta nuestra hermandad